noviembre 3, 2020
Actualmente, cerca de la mitad de las empresas declaran estar en cierto riesgo de cierre debido al covid- 19, siendo las pequeñas y medianas empresas uno de los sectores más afectados, quienes han visto sus ventas reducidas en más de un 30% y que desde octubre del año pasado han sobrellevado la crisis social -y desde marzo-, la pandemia, que los obligó a cerrar sus puertas y a muchos de ellos, a reinventarse. Es con ese escenario que Pyme UC, el programa de responsabilidad social de nuestra Escuela de Administración, desarrolló el plan de mentorías de emergencia, donde junto a la red de Mentores Pyme UC apoyaron y asesoraron a negocios y empresas afectados por la contingencia, que en su mayoría estaban ubicados en la denominada “zona cero” y que necesitaban enfrentar aspectos puntuales como recuperar ventas, gestión de la liquidez, revisar modelos de negocios, entre otros.
“Comenzamos el año con las mentorías, donde hicimos el catastro y visitamos nuestra zona, contando sobre el programa. Algunas de las empresas fueron del sector, entonces esas mentorías que se desarrollaron fueron más breves, con la idea de buscar algún tema en lo que se podría mejorar y ver cómo enfrentarlo”, cuenta Marisol Arriagada, directora de Pyme UC, programa que también cuenta con apoyo de BCI, sobre cómo iniciaron el trabajo de las mentorías de emergencia. Y agrega que, a pesar de que el foco del programa está orientado a pequeñas y medianas empresas, “aquí vimos la necesidad de abrir el brazo hacia las microempresas, porque era necesario. Ese es el espíritu y lo que nos anima a ayudar”, indica. De hecho, según estimaciones del programa, quienes se beneficiaron de este tipo de asesorías, fueron en su mayoría, microempresas.
Este tipo de mentorías excepcionales, que tienen una duración más corta que el programa de mentorías tradicional de Pyme UC, en un principio estaban más focalizadas en salir de la crisis, pero con el paso de los meses, migraron hacia “cómo repensar la empresa, reinventarse y mirar hacia adelante”, cuenta la directora de Pyme UC sobre el diagnóstico que hacen de las mentorías de emergencia. De la misma forma, la recepción de este tipo de asesoría por parte de los empresarios ha sido muy satisfactoria. “En general, las encuestas muestran que las mentorías se desarrollaron muy bien y que fueron bastante exitosas”, indica Marisol Arriagada sobre el balance final de las mentorías de emergencia.
“Es positivo contrastar las visiones de uno con profesionales objetivos y bien preparados que permiten visualizar nuevas oportunidades y formas de enfrentar los desafíos de la empresa” y “Participar de la mentoría de emergencia, en momentos de crisis como la que atravesamos actualmente, fue una experiencia que agrega valor, reflexión e intercambio de miradas, para generar estrategias efectivas en gestión empresarial”, son algunas las impresiones que Pyme UC recogió de los empresarios que fueron parte de estas mentorías de emergencia.
En la misma línea, y a pesar de que originalmente las líneas de emergencia partieron de forma presencial, rápidamente pasaron a formato virtual, lo que potenció que pudiesen llegar a más empresas de regiones, intención que ya venían trabajando desde hace algún tiempo. “Dentro de todo este contexto, estamos contentas porque porcentualmente, hemos podido llegar más a regiones; dentro de las mentorías de emergencia, casi la mitad han sido de fuera de Santiago. Las mentorías han migrado a un formato online y a tener empresas más pequeñas”, dice la directora de Pyme UC.