Como una respuesta a un país en cambio constante, la Escuela de Administración UC se une como “socio académico” con Fundación Colunga en un programa enfocado en entregar herramientas de liderazgo a miembros de diversas fundaciones de carácter social a lo largo y ancho del país, buscando apoyarlos en el logro de sus respectivas misiones en pos de un mejor Chile.  

La sede de Fundación Colunga, frente a Parque Bustamante, fue el lugar donde se dio inicio al proceso formativo de 33 jóvenes líderes de fundaciones dedicadas a la educación, la profundización de la democracia, la equidad de género, el apoyo a la diversidad sexual, a los migrantes, entre otras. Este virtuoso grupo fue especialmente seleccionado por la Fundación de un gran número de aplicantes en busca de herramientas formativas para ser mejor aporte en sus organizaciones y a la sociedad en su conjunto. 

Al respecto, el director de la Escuela de Administración UC, José Tessada expresó la relevancia de los líderes positivos en una sociedad en movimiento continuo: “El centro de esto son las personas. Eso es lo que busca apoyar la sociedad civil y las distintas fundaciones que ustedes representan. Desde las distintas realidades y necesidades que ellos tengan. Además de eso, que es el foco de este programa, también está el hecho de que las fundaciones están altamente cuestionadas en este momento, sin embargo, es justamente en los momentos difíciles cuando los líderes marcan la diferencia. Eso es lo que buscamos: cómo la capacidad de liderar se vuelve una herramienta útil para solucionar conflictos y dar soluciones”. 

Percepción compartida por el director Ejecutivo de Fundación Colunga, Arturo Celedón, quien agradeció el apoyo de la Escuela de Administración UC en este diplomado: “Le agradecemos especialmente a la Universidad Católica por ser nuestro socio académico en este proceso, quienes también comparten la visión de lo importante que es trabajar con los líderes y lideresas en Chile. Hemos aprendido a lo largo de nuestra trayectoria que lo importante no son los proyectos, son las personas que lo componen y dentro de ellos la actitud de liderazgo para movilizar y lograr que las cosas pasen. Las Naciones Unidas indican que esta es la generación del cambio. Por eso tiene todo el sentido apostar por ustedes”.  

Los alumnos escogidos para ser parte de la primera versión de este diplomado tienen una edad promedio menor a cuarenta años, en equilibrio respecto a género, conocimientos previos y experiencia.  

El objetivo de este programa es entregar herramientas a los estudiantes para tomar roles de liderazgo efectivo, independiente si su cargo lo exige o no. Esto para aportar en la detección de incoherencias y fisuras en el tejido social y lograr de ese modo movilizar a sus compañeros y jefaturas para lograr los cambios que marcan la misión de las fundaciones escogidas. Es por eso que la Escuela de Administración de la Pontificia Universidad Católica decidió ser parte de este desafío como parte del aporte a la sociedad y al bien común, que es corolario de sus acciones diarias.