julio 3, 2017
[:es]La equidad de género se ha convertido en un tema importante en la sociedad y empresas chilenas en las últimas décadas luego de las desigualdades sociales. «Los sesgos de género son las barreras para la equidad de género en las organizaciones y empresas», dice Mariana Gaba, experta argentina en áreas de género, liderazgo, cultura organizacional y gestión del cambio.
Gaba explica cuáles son los principales desafíos para la inclusión del enfoque de género en las organizaciones, especialmente marcados por la disyuntiva entre agenda de género y meritocracia. «El principal desafío de los sesgos de género es reconocer que existen en el interior de las organizaciones. Lo que uno encuentra habitualmente es que las personan piensan y dicen que no ocurren sesgos de género en sus empresas porque son totalmente meritocráticos. Hay que abordar el problema desde una perspectiva reflexiva y no culpabilizadora».
«El espacio de conversación de hoy sirvió para mostrar cómo los sesgos de género por definición son inconscientes en los seres humanos ya que están naturalizados y tienen que ver con la crianza, con los aspectos culturales de los países y con los roles tradicionales de hombres y mujeres», asegura.
La definición clásica de meritocracia, según la experta argentina, es la forma de gobierno basada en el mérito, donde las posiciones jerárquicas son conquistadas con base al mérito. Predominan los valores asociados a la capacidad individual y al espíritu competitivo.
Mientras tanto define el concepto de sesgo como un «error sistemático en el que las personas incurren cuando al hacer muestreos o ensayos seleccionan unas respuestas frente a otras». Y agrega que «los sesgos ponen en juego a estereotipos descriptivos y estereotipos prescriptivos».
Gaba ejemplifica con frases habituales para entender y comprender sesgos de género en el mundo empresarial: seguramente no esté interesada, ahora que tiene familia; las cuotas son lo peor para una meritocracia; no la conozco lo suficiente, he conversado poco con ella; ella no es lo suficiente firme; tiene excelentes resultados, pero algunas personas dicen que es algo fría y distante; ella es genial, pero no está todavía preparada.
Las condiciones que acentúan los sesgos de género en las organizaciones son las tareas tipificadas como masculinas, posiciones de mayor jerarquía, criterios vagos de evaluación, cansancio y las mujeres que son madres.
Con respecto a la «trampa del mérito», dice que «las organizaciones parten con la premisa que son meritocráticas. Es decir, entienden a la meritocracia como un sistema neutral y objetivo, donde las personas con capacidades y talentosas pueden crecer en la empresa. Sin embargo, cuando nosotros hablamos de sesgos de género estamos colocando sobre la mesa que la definición de meritocracia del diccionario puede funcionar, pero que la realidad es muy diferente. Por ejemplo, en Chile hay mujeres más capacitadas y educadas, pero con una tasa de participación laboral menor».
Estas fueron las principales conclusiones de la charla «Los sesgos de género como barrera para la equidad de género en las organizaciones», perteneciente al Programa In Company del Centro de Desarrollo Directivo UC, donde participó Mariana Gaba, experta argentina en áreas de género, liderazgo, cultura organizacional y gestión del cambio.
Licenciada en Psicología de la Universidad de Buenos Aires y Magíster en Psicología Organizacional de la Universidad de Belgrano. Fue docente e investigadora en el campo de la salud y género en la cátedra de Introducción a los Estudios de Género por más de 10 años en la Universidad de Buenos Aires. Posee experiencia en consultoría organizacional y en temáticas de género y diversidad.[:]